San Isidro San Isidro, cuyo nombre era Isidro de Merlo y Quintana, estuvo casado con Santa María de la Cabeza. Trabajaba para el noble Juan de Vargas y en su casa en Madrid hay actualmente un museo con exposiciones temporales sobre temas madrileños y también con recuerdos relativos a la vida del santo. Se le atribuyen varios los milagros, cosa fundamental en los procesos de canonización para poder considerar santo a una persona. Entre los milagros, por ejemplo, el milagro del pozo en el que, por su oración, subieron las aguas de un pozo para poder rescatar a su hijo, que después también sería reconocido santo, San Illán, que había caído en él. San Illán Labrador También el milagro de los Ángeles, según se dice los ángeles araban el campo mientras que San Isidro rezaba, aunque en el expediente de canonización, Iván de Vargas ve cómo dos ángeles ayudaban a Isidro a arar sus tierras más rápido, ya que anteriormente Isidro se había detenido a rezar en todas las parroquias por las