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Lewis Jones (1836-1904)

 
 
Lewis Jones (1836-1904), uno de los líderes principales de la Colonia galesa en la Patagonia, nació en Caernarfon. Trabajó de impresor y vivió durante cierto tiempo en Holyhead y Liverpool, donde se convirtió en un miembro destacado de la Sociedad. 
 
En 1862 fue elegido por el comité para inspeccionar las tierras de la Patagonia, junto con el capitán Love Jones-Parry. En 1865, fue enviado a Patagonia junto con Edwin Cynrig Roberts para preparar la llegada del primer contingente de emigrantes. 
 
Los primeros días de la Colonia resultaron ser durísimos, tanto que muchos de los emigrantes se desilusionaron profundamente. Muchos acusaron a Lewis Jones, por aquel entonces presidente de la colonia, quien decidió abandonar temporalmente Patagonia, pasándose 18 meses trabajando de impresor en Buenos Aires. En 1867, tras enterarse de que un número de colonos tenía la intención de dejar la Patagonia y emigrar a la provincia de Santa Fe en el noreste de Argentina, regresó y consiguió persuadirlos para que se quedasen. Lewis Jones regresó a Patagonia con su familia en 1871. 
 
Lewis y su esposa Ellen tuvieron dos hijas: Eluned Morgan, quien después llegaría a ser una gran figura literaria, y la otra Myfanwy Ruffydd, casada con Llwyd ap Iwan, el hijo de Michael D. Jones. 
 
A partir de la década de 1870, Lewis Jones tuvo un papel fundamental en el gobierno de la colonia. Fue el responsable de la primera imprenta de la colonia y fundó los periódicos "Ein Breiniad" (1878) y 'Y Drafod' (1891). En 1898 se publicó su historia de la Colonia, "Y Wladfa Gymreig". 
 
La ciudad de Trelew [lit. "la ciudad de Llew"] lleva su nombre y todavía permanece allí una estatua suya. Jones también desempeñó el papel de pionero en los planes de construcción del ferrocarril entre Porth Madryn y el Valle del Chubut. Las obras de construcción empezaron en 1886 y el ferrocarril fue inauguarado oficialmente tres años después. La ciudad del final de la línea fue Trelew (en honor de Lewis Jones). Una curiosa estauta de Jones se puede todavía contemplar en el Parque Centenario de la ciudad.
 
Fuente: Biblioteca Nacional de Gales

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