Frontispicio de l'Augustinus, en su edición de 1640.
El janseanismo son teorías del
obispo de Ypres y teólogo francés, Jansenio, Cornelius Jansenius (1585-1638), versadas en su libro “Agustinus”,principalmente. Su filosofía resurge de la disputa teológica antigua entre la libertad y la predestinación, y se inclina Jansenio
por la predestinación en detrimento de la libertad.
Pensaba que, por causa del
pecado original, el hombre sólo podía salvarse mediante la
intervención de la Gracia, esta intervención inexorablemente inclinaba la voluntad hacia el bien, pero en este proceso, la libertad interior del hombre
no se podía resistir, lo que implicaba una limitación del carácter
universal de la Redención, ya que los no predestinados no tenían posibilidad de recibir ningún influjo Cristo y con lo cual, quedaban fuera
de la salvación por estar irremediablemente sometidos a
los efectos del pecado original. En su concepto de predestinación, no estaban incluidas todas las almas, unos estaban predestinados y otros no.
Jansenio nunca quiso enfrentarse a la ortodoxia de la Iglesia establecida ni causar ningún cisma. Antes de morir dio orden a sus discípulos de obedecer a Roma y modificar todo aquello que pudiera resultar inconveniente.
Muchos desatendieran su última voluntad y promovieron las ideas de Jansesio desatendiendo las condenas de los papas Urbano VIII (1615) y Alejandro VII en la constitución "Ad Sacram beati Petri Sedem”.
Clemente XI asestó al jansenismo el golpe final a través de la bula "Unigenitus Dei Fillius" (1715), que ocasionó la desobediencia de algunos de los obispos holandeses liderados por Cornelius Steenoven en 1723. Provocaron un cisma a partir del cual surge la Iglesia Vetero-católica de Utrecht.