Pero Vázquez de la Frontera, marino español natural de Palos de la Frontera, participó en un viaje portugués en 1452 que tuvo lugar en el Océano Atlántico y que pudo haber alcanzado el Mar de los Sargazos, según algunos, este hecho habría animado a Cristóbal Colón y a los hermanos Pinzón en la maduración de la idea de emprender el viaje en el que seprodujo el Descubrimiento de América.
Fue posiblemente Pero Vázquez de la Frontera, quien animase a Colón y los Pinzón a realizar el viaje; y quizás sea quien mejor simbolice las buenas o estrechas relaciones, que mantuvieron los navegantes del sur peninsular, a veces pacíficas y otras veces no tanto, tanto andaluces como portugueses.
La fama de Pero Vázquez le vino en el Puerto de Palos por su gran experiencia de navegante en la armada portuguesa, que era temida y admirada en la época porque representba pericia y prestigio.
En los Pleitos colombinos dice Fernando Valiente:
"Quel dicho Cristóbal Colón, antes que fuese a negociar con los Reyes Cathólicos sobrel dicho descubrimiento, vino a esta Villa de Palos...e posó en el monesterio de La Rábida, e de allí venía algunas vezes a esta Villa e hablava con un Pero Vasques de la Frontera, que era onbre muy sabio en el arte de la mar e avía ydo una ves a fazer el dicho descubrimiento con el ynfante de Portugal..."Declaración que corrobora Alonso Gallego:
"Conosció (a Colón) y le vio harto pobre y nesçesitado..., y oyó dezir a un Pero Vasques de la Frontera, vezino de la villa de Palos, al tiempo quel dicho Colón vino a querer yr al dicho viaje, quel dicho Colón venía a tomar lengua y aviso del dicho Pero Vasques de la Frontera, como perona que avía sido criado del rey de Portugal y tenía noticia de la tierra de las dichas Yndias".El marino de Palos, al hilo de lo que dicen testigos de los acontecimientos, habría animado a Colón, los Pinzón, y a sus tripulaciones a no desfallecer, siguiendo constantes hasta llegar al "mar de yerbas", que posiblemente fuese los Sargazos. Admitía que la decisión de retornar una vez en la zona fue posiblemente lo que le había impedido a el y a su expedición, en tiempos del Infante D. Enrique, arribar a las míticas costas orientales del "dorado", de legendaria riqueza.
El viaje que se refiere y que ya fue estudiado por Cortesao, sería el de 1452 de Diego de Teive, en el que iba como piloto Pero Vázquez, de Palermo, que por entonces era bastante joven. Seguramente el viaje se hizo al hilo del retorno de un posible navío arrastrado accidentalmente a las costas americanas, y que iba buscando la legendaria isla de las Siete Ciudades.
Habrían salido de la Isla de Faial en las Azores, y navegando rumbos SE para encontrar los vientos alisios, se adentrarían más de 150 leguas direcció SO según testimonios de Las Casas y de Hernando Colón. Pero, posiblemente la distancia debió ser el doble, porque el «mar de yerbas» seguramente se correspondería con una amplia y densa zona de los Sargazos, 29º N y 40º O.
Desesperados y pensando que no podían seguir avanzando, decidiero volver haciendo un gran arco por el N y buscando los vientos de Occidente, lo cual indicaría que quizás tenían referencias sobre el modo de volver.
Descubren Azores, entonces denominada Isla de Flores, para ascender hasta el cabo Clara (Irlanda). Algunos historiadores piensan que esperaban encontrar al otro lado del Océano Atlántico, no sólo islas, sino también un gran continente que quizás identificaban con las costas asiáticas.
Esta fue en suma, la primera expedición para la exploración concienzuda del Atlántico, aunque no se tuviese éxito, pero motivó cierta frustración y también cierto rechazo de la teorías que afirmaban que se podía llegar a Oriente por Occidente, por el Atlántico.
Pero Vázquez de la Frontera sirvió como marino al servicio tanto de Castilla como de Portugal y en un tiempo en el que se concentraron las cotas más altas del arte y ciencia de la navegación, en el que una mentalidad deseosa de aventuras y de encontrar nuevos horizontes caracterizaba el talante marinero. Con estas características Pero Vázquez de la Frontera es un excelente representante del marino en la Edad Moderna de la costa suratlántica de la Peninsula; compitiendo y/o colaborando, adquirieron allá por la segunda mitad del XV conocimientos extraordinariamente novedosos con sus incursiones en África. La navegación se basaba realmente más en la experiencia que ne la ciencia todavía, y fue precisamente una gran experiencia la que llevaría a las naves desde estas costas a los mares más remotos comunicando a civilizaciones hasta entonces aisladas. Nacía una era nueva en la que las relaciones humanas de toda índole adquirieron, podría decirse, la primera globalización. No hay nada nuevo bakjo el sol; y una dimensión global y planetaria nacía ahora para bien o para mal, pensemos en lo segundo, pero positivamente nada sería de aquí en adelante igual.